Muchos franceses eligen España para comprar allí su segunda residencia. ¿Cuáles son las regiones más populares para los franceses en España? Descifrado.
Sol, miles de kilómetros de costa y cercanía con Francia… La Península Ibérica lo tiene todo y los franceses lo han entendido bien. En 2021 se registraron en España 655.000 operaciones de compraventa de inmuebles residenciales. Entre ellos, 1/5 o 111.000 fueron hechos por extranjeros. “En total, el 54% de las compras las realizan extranjeros residentes en España, y el 46% extranjeros residentes fuera de España y que por tanto compran una segunda vivienda”, detalla Romain Traversino, director comercial de Compro en España.
De esta cantidad de transacciones, el 8% son realizadas por franceses. Estos últimos ocupan así el tercer lugar entre las comunidades de compradores extranjeros en España, “por detrás de británicos y alemanes”, precisa Romain Traversino. Entre las regiones favoritas de los franceses, Cataluña gana la medalla de oro. Y no es para menos, una de cada dos compras que hace un extranjero en Cataluña la hace un francés.
Cataluña, la región favorita de los franceses
La mitad de las compras de segunda residencia que realizan los franceses en España se encuentran en Cataluña. La preferencia por la región catalana está alimentada por varios factores muy ventajosos para la comunidad francesa. En primer lugar, la región es popular geográficamente, ya que limita con Francia. “Tenemos una sucursal en Cataluña y operamos a menudo en la Costa Brava. Muchos residentes de Toulouse o Montpellier buscan propiedades en esta zona, ya que está a solo 3 horas en coche. Esto le permite ganar algunos metros cuadrados adicionales en comparación con las propiedades en Francia y tener una residencia no lejos de la playa. Es más atractivo que comprar en Montpellier o Cap d’Agde”, analiza el experto inmobiliario.
Otra ventaja de la región, Cataluña está ultraconectada con Francia. La autopista permite llegar a Toulouse o Montpellier en tres horas. El aeropuerto de Barcelona tiene numerosas conexiones con toda Francia, incluyendo 20 vuelos diarios a París así como una línea TGV Barcelona – París que pasa por Montpellier y Lyon, entre otros.
Finalmente, el factor del idioma juega un papel muy importante con los compradores franceses. “Los catalanes hablan mejor francés que el resto de españoles, porque aquí hay más franceses. Los catalanes también tienen que comunicarse con muchos franceses en el turismo”, recuerda el experto inmobiliario. Un conocimiento de la lengua francesa, por tanto, más desarrollado en la región catalana que en el resto de España. Además, el idioma catalán en sí es mucho más cercano al francés en términos de vocabulario y gramática, lo que hace que el francés sea aún más fácil para un catalán que para un español. “Todos estos factores animan a los franceses a preferir comprar en Cataluña”, resume el director comercial.
Además de Cataluña, la costa española también atrae a los franceses. Según el experto inmobiliario Idealista, las provincias de Alicante, Girona, Málaga y Valencia son las zonas más buscadas de Francia. Por último, una pequeña parte de los franceses se deja seducir por las regiones españolas “menos avanzadas en el sector inmobiliario como Extremadura, Aragón o el País Vasco”, apunta también Romain Traversino.
Perfiles muy variados
Entre los compradores franceses, los perfiles son muy variados según la región. Según la agencia inmobiliaria Compro en España, las localidades costeras españolas atraen perfiles muy diferentes, tanto compradores que han ahorrado varios años como CSP+. “Veo que en Valencia y Alicante, puedes tener gente que ha salvado toda una vida, como funcionarios, ex gendarmes, profesores, que han pagado su vivienda habitual y se van a jubilar. Estos últimos se comprarán un piso o una casita por unos 100.000 euros para disfrutar del invierno durante su jubilación. Los jubilados o futuros jubilados representan por tanto una gran parte de los compradores, especialmente en Roses, que es una zona cercana a Francia y donde es fácil comunicarse en francés”, apunta el director comercial.
En el resto de la Costa Brava, el perfil es notablemente más joven. “Son principalmente citadinos, de cuarenta o cincuenta años, de Toulouse o Montpellier, que llegan a la Costa Brava en coche”, describe Romain. En el Baix Empordà, es decir Platja d’Aro, Palamós y Sant Féliu, los clientes compran más viviendas con un presupuesto que oscila entre los 400.000 y los 500.000 euros. “Hay bastantes empresarios del suroeste y ejecutivos allá”, señala el director comercial.
Finalmente, muchos franceses compran un pied-à-terre en Barcelona. En este caso, el perfil será más ejecutivo de CSP+, con un presupuesto que oscilará entre los 200.000 y los 300,00 euros. “A los ejecutivos les gusta el dinamismo de Barcelona, y fácilmente pueden venir aquí el fin de semana o teletrabajar aquí. Sin embargo, la capital catalana sigue siendo una ciudad que atrae perfiles bastante variados”, analiza el experto.
Subida de tipos hipotecarios: España se mantiene optimista
En un contexto de inflación global, los bancos centrales están dando la voz de alarma. Como consecuencia directa de esta inflación, las tasas hipotecarias están aumentando. No obstante, este aumento de los préstamos inmobiliarios tiene más impacto en el mercado inmobiliario francés que en el español. “Las tasas en Francia eran muy bajas en comparación con el resto de Europa. Los bancos no ganaron mucho en términos de hipotecas. En España era más o menos la norma”, recuerda Romain.
En concreto, para comprar una segunda vivienda en España, los compradores franceses disponen de tres opciones. Pueden comprar propiedades en efectivo, obtener un préstamo en Francia hipotecando una propiedad. “Puede ser una vivienda habitual u otro inmueble del patrimonio del comprador” especifica el director comercial de Compro en España.
Tercera opción, pueden comprar directamente en España y Península Ibérica las tasas para segundas residencias son del 2-3%. “Como las tarifas son más altas, se les va a pedir un aporte que corresponde a la mitad del proyecto. Los pagos mensuales serán entonces más bajos que los pagos mensuales franceses”, explica Romain Traversino.
A pesar de una subida de tipos, España no debería sufrir este aumento, especialmente para la compra de segundas residencias. “Este sector depende menos del apalancamiento bancario en este caso, a diferencia de las residencias principales o las inversiones en alquiler”, analiza el experto antes de concluir: “Somos optimistas, porque las segundas residencias representan entre el 40 y el 50% de nuestra actividad, nuestros clientes muchas veces ya tienen patrimonio y por lo tanto tienen situaciones propicias para comprar. Sin embargo, con el aumento de las tasas, el monto de los préstamos podría aumentar aún más, por lo que los compradores prefieren comprar ahora y anticipar un mayor aumento”.