El frijol corredor, cuyo nombre en latín es Phaseolus coccineus, es una planta herbácea originaria de las montañas de México y América Central, que crece a mayor altura que el frijol común. En la década de 1600, creció en jardines ingleses y estadounidenses como planta alimenticia, pero ahora se cultiva más comúnmente como ornamental por sus racimos de impresionantes flores escarlatas o blancas. Por tanto, es útil en más de un sentido y, al mismo tiempo, su cultura no es nada compleja. ¿Quieres saber más sobre esta planta ornamental y vegetal simplemente hermosa?
¿Se puede cultivar frijol en Francia?
A diferencia de las judías verdes regulares (P. vulgaris), es una especie perenne, aunque generalmente se trata como anual. Dado que el frijol rojo se desarrolla muy bien en las zonas de rusticidad 7 a 11, se puede cultivar en casi cualquier lugar de Francia, excepto en Haute-Savoie, Hautes-Alpes y Hautes-Pyrénées y sus territorios circundantes.
¿Por qué elegir esta planta?
El frijol escarlata se parece mucho a los frijoles verdes comunes, con hojas trifoliadas en forma de corazón de color verde oscuro y vetas teñidas de púrpura en la parte inferior. Al trepar a un enrejado u otro soporte en un jardín, estas enredaderas trepadoras de rápido crecimiento pueden alcanzar y, en ocasiones, incluso superar los 4,5 m de altura (aunque normalmente miden entre 1,8 y 2,4 m). ¿Cuáles son sus principales fortalezas?
El frijol corredor altamente ornamental
En verano, unos dos meses después de la siembra, las plantas producen las flores típicas de las leguminosas, de color rojo escarlata u ocasionalmente blancas. El frijol escarlata florece en impresionantes racimos de flores que se abren al amanecer y se cierran al anochecer. No solo son muy decorativas, sino que también atraen mariposas, abejas y otros insectos polinizadores. Estos magníficos racimos son la razón principal por la que uno elige plantar el frijol escarlata en su jardín ornamental. Se ven especialmente agradables estéticamente cuando se cultivan en algún tipo de soporte vertical.
En estos días, el frijol escarlata a menudo se cultiva como planta ornamental solo por sus llamativas flores coloridas. Tenga en cuenta que si quita las vainas en desarrollo, alentará a la planta a continuar con la floración. Una idea muy decorativa es dejar que la planta se suba a una valla de tela metálica para convertirla en una especie de seto y romper la vista hacia la calle o la propiedad vecina. Los enrejados, las estacas, los arcos y, sobre todo, los tipis con vegetación formados por unos pocos postes atados en la parte superior son otra opción atractiva que puede convertirse fácilmente en el centro de atención del jardín ornamental. Combínalo con arbustos de flores naranjas, amarillas o rojas para un efecto más impactante.
Polinización y cultivo como planta vegetal.
Después de las flores, aparecen las vainas que alcanzan relativamente rápido una longitud de 30 cm. Cuando las condiciones de cultivo son óptimas, el fríjol es la más productiva de todas las variedades de fríjol. Se forman menos vainas en climas cálidos, por lo que la mejor cosecha de frijoles se produce en los veranos más fríos o en el otoño. Las semillas son bastante grandes, miden alrededor de 2,5 cm, con 6 a 10 semillas por vaina. Si desea cultivarlos, tenga en cuenta que los frijoles españoles se cruzan fácilmente.
¡Todas las partes de la planta son comestibles!
Las flores de la planta también son comestibles, tienen sabor a frijol y se pueden usar en ensaladas. Las vainas de fríjol verde son comestibles hasta que se vuelven fibrosas y se pueden hervir, cocer al vapor, saltear u hornear (pero solo deben comerse crudas con moderación). Como son más duras que muchas judías verdes, es mejor cortarlas en rodajas antes de cocinarlas. A algunas personas no les gusta la textura áspera de las pieles y evitan comerlas. En Mesoamérica, las raíces gruesas y almidonadas fueron utilizadas de manera similar como alimento por los pueblos indígenas.
Las semillas blancas o multicolores dentro de las vainas se pueden comer frescas cuando aún tienen un color rosado-púrpura (peladas y cocidas como frijoles blancos o habas) o se pueden secar para almacenarlas a largo plazo. Las judías verdes, con su rico sabor a castaña, requieren un largo tiempo de remojo y cocción una vez secas. El color de las semillas varía de blanco a negro brillante, negro violáceo moteado de rojo oscuro o púrpura moteado de negro. Su color grisáceo después de la cocción no es especialmente atractivo, pero el sabor sigue siendo impecable.
Cultivo y condiciones óptimas
Para obtener los mejores resultados, cultive fríjol escarlata a pleno sol en un suelo rico con abundante materia orgánica y humedad media. Esta especie es más tolerante al frío que otras judías verdes, por lo que las semillas se pueden sembrar antes de que el suelo se haya calentado por completo. De todos modos, la temperatura del suelo debe ser de al menos 10° C. El follaje no puede tolerar las heladas, por lo que no debes plantar demasiado pronto. Siembre en el suelo a una profundidad de 5 a 8 cm y espacie las semillas de 10 a 20 cm. A diferencia del frijol común, cuando las plantas germinan, los cotiledones permanecen en el suelo (esto se llama germinación hipogea). La germinación tarda de 7 a 14 días. Puede comenzar las plántulas en el interior unas semanas antes de las últimas heladas esperadas y trasplantarlas al jardín en unas pocas semanas.
Fuente utilizada: hort.extension.wisc.edu
